Pasar por las diferentes etapas de la carrera académica es un período de crecimiento y desarrollo en todas las áreas. Sin embargo, para muchos jóvenes receptores de DACA, el camino más allá de este viaje de auto descubrimiento es uno que alberguen obstáculos únicos por venir.
Con la mayoría de los inmigrantes y personas indocumentados, el miedo a la deportación y el estado legal expuesto es una gran preocupación; este temor y preocupación se extiende también a los jóvenes receptores de DACA y puede resultar en disuadir de seguir la educación superior o llegar a diferentes recursos educativos. Aunque el desafío de arriesgar todo el futuro familiar es en gran medida un peso pesado, esto no significa que la universidad esté completamente fuera de la cuestión. Algunas escuelas, como la Universidad de Houston, ubicada en Houston, TX, se enorgullecen de su diversidad y al hacerlo son muy acogedoras para los estudiantes internacionales y de DACA. Incluso ofrecen programas y asistencia específicamente a aquellos que buscan esta transición académica. Mirar hacia las escuelas locales que ofrecen organizaciones específicas de DACA, asistencia, e incluso clubes pueden ayudar en gran medida a disminuir el estrés y proporcionar motivación para el crecimiento y el desarrollo.
También es importante destacar el tema de las disparidades y cómo esto afecta las decisiones y dificultades que los receptores de DACA enfrentan como estudiantes. Aunque pueden estar conscientes de las opciones que están disponibles para ellos, los estudiantes de DACA también pueden sentirse perdidos o inseguros en términos de su identidad socioeconómica que encaja en un entorno universitario. El proceso enrevesado que está preparando y entrando a la universidad viene con costos abrumadores tales como las cuotas de solicitud y de prueba en aumento, así como algunas universidades que no tienen una población diversa de estudiantes. Dado que la mayoría de los estudiantes de DACA tienen una infancia en una comunidad de bajos ingresos, generalmente dentro de su propio enclave étnico, es muy desalentador y a veces desalentador. Sin embargo, para muchos estudiantes de DACA hay exenciones de cuotas para las pruebas de admisión a la universidad y las cuotas de solicitud que no requieren la revelación de la ciudadanía, así como la asistencia que se ofrece a través de programas escolares dedicados a ayudar a los estudiantes subatendidos en la exposición y preparación a la universidad, como el programa AVID.
Es importante recordar que el estatus legal no define a un individuo por ningún medio. La posibilidad de crecer de la adversidad y lograr el éxito a su manera es muy posible, ya sea graduándose de la escuela secundaria, de la universidad comunitaria, de una universidad estatal o de una escuela vocacional. Nuestros estudiantes de DACA están en aumento y brillan más que nunca representando la fuerza y la belleza en la cultura.
