La salud mental de los inmigrantes se ve afectada por una combinación de factores, como la discriminación, la aculturación y la inmigración, que son especialmente perjudiciales para la comunidad latina en general y, en particular, para aquellos que pueden ser más vulnerables, como los niños pequeños y los adolescentes. Incluyendo los factores que contribuyen a las disparidades raciales y étnicas, la realidad de la pandemia de COVID-19 quizás empeore la situación. El número de casos de COVID-19 en las comunidades latinas de Estados Unidos es el segundo más alto. También son más propensos a ser hospitalizados y a morir por la enfermedad que otros grupos étnicos y raciales.
En 2019, según la Oficina del Censo de Estados Unidos, se estima que 60,5 millones de personas hispanas o latinas viven en Estados Unidos. De ellos, el 22,3% son menores de 19 años. Alrededor del 15,1% de estos jóvenes experimentan síntomas de depresión, según Mental Health America.
Hace tiempo que se necesita un cambio. Es posible que haya una mayor necesidad de tratamientos de salud mental culturalmente sensibles que nunca antes.
Los jóvenes latinos y la salud mental
Cuando hablamos de la juventud latina, incluimos a los jóvenes hasta los 18 años.
Los estudios de investigación han revelado que la juventud latina experimenta tasas más altas de depresión y suicidio que otros grupos raciales-étnicos en los Estados Unidos, dice la doctora Gabriela Livas Stein, directora asociada de formación clínica en la Universidad de Carolina del Norte en Greensboro. «Este aumento de los síntomas comienza ya en los últimos años de la escuela primaria y se ha documentado hasta la edad adulta joven».
Según una investigación de 2017, alrededor del 22% de los jóvenes latinos en los Estados Unidos experimentan síntomas depresivos. Las cifras anteriores se aplican tanto a los latinos nacidos en Estados Unidos como a los latinos nacidos en el extranjero, aunque las tasas de condiciones de salud mental tienden a ser más altas en los nacidos en Estados Unidos. Los jóvenes latinos LGBTIA+ también pueden enfrentarse a factores de estrés adicionales. El Proyecto Trevor estima que los jóvenes latinos LGBTQ tienen un 30% más de probabilidades de informar de un intento de suicidio que los niños y adolescentes latinos no LGBQ.
La depresión en las comunidades latinas
A menudo, la investigación sobre salud mental se realiza desde una perspectiva blanca. Sin embargo, la cultura puede influir en la forma en que las personas describen y hablan de los síntomas de salud mental. La depresión puede ser vista como una debilidad en algunas culturas latinoamericanas. Para muchos latinos, la depresión puede ser algo que debe tratarse en privado. Además, los jóvenes latinos en Estados Unidos suelen ser hijos de inmigrantes con traumas propios no resueltos.
